Al parecer, la víctima se habría negado a pagar más de un millón de pesos por un trabajo por el que inicialmente le habían pedido $200.000.
La víctima, identificada como Edgar Cediel, de 37 años, se acercó a un establecimiento ubicado en la carrera 13 con calle 23 de la capital santandereana junto a su esposa, con el fin de comprar un repuesto para el vidrio de su carro. El hombre ingresó a un establecimiento en el que, además de ofrecerle lo que él necesitaba inicialmente, le propusieron un arreglo en sus llantas.
El afectado también contó que los mecánicos le dijeron que no costaría más de $200.000, por lo que dio luz verde para hacer el arreglo. Sin embargo, en el momento en el que los empleados del local pasaron la factura, Cediel se llevó una sorpresa:
“Fuimos a comprar un vidrio para mi camioneta, un muchacho me paró y me dijo que tenía el vidrio que necesitaba, me parquee, y me dice que l allanta está floja, me dice, si quiere le le hacemos la reparación porque la llanta se le puede salir, me dijo que costaba20 mil, la derecha, y luego la otra 20 mil y otras cosas, y todo daba 110 mil pesos, luego me dijo que los frenos tenían un problema y que tocaba cambiarle un guarda polvos, y yo dije, listo, y yo dije, más o menos me van a cobrar 200 mil pesos”
Al parecer, los trabajos que los mecánicos hicieron al carro valían mucho más de lo que presuntamente habían dicho inicialmente. La factura contemplaba un total de $1.400.000, que Cediel se negó a pagar.
“Yo les dije que eso no lo iba a pagar, eso no fue lo acordado, le dije, que le pagaba con gusto 2 millones, pero con la Policía al lado, y ahí se puso agresivo”
Después de esto, según el relato de la víctima, uno de los mecánicos le lanzó un golpe en la cara que lo hizo sangrar. La discusión no terminó ahí y uno de los empleados habría instado a sus compañeros a “darle bala” a Cediel, que iba acompañado de su esposa y su hijo y que decidió retirarse del lugar rápidamente ante el riesgo que corrían sus seres queridos.