Tras el pánico que causó el supuesto anuncio de la estructura criminal, las autoridades establecieron que se trataba de una falsa alarma.
Una supuesta amenaza por parte del Clan del Golfo hacia un colegio de Puerto Colombia se conoció este inicio de semana. Un panfleto que alertaba un “baño de sangre” alertó a la comunidad educativa que tuvo que suspender las clases presenciales.
En el panfleto que circuló a través de redes sociales, supuestamente la estructura criminal amenazaba de muerte si no se liberaba a alias Mamón, un delincuente que las autoridades capturaron en diciembre y era uno de los más buscados en el Atlántico.
Supuestamente el principal objetivo, de no liberar al criminal, era la Institución Educativa Francisco Javier Cisneros, ubicada en Puerto Colombia, Atlántico.
Por lo anterior, los directivos del colegio decidieron implementar nuevamente la virtualidad, para evitar poner en riesgo a estudiantes y docentes de la institución. Sobre todo, teniendo en cuenta los ataques que perpetró ese grupo armado hace unas semanas en distintas partes del país.
Los responsables del panfleto son los mismos estudiantes del plantel educativo
Debido al pánico que este hecho generó, las autoridades tomaron cartas en el asunto y decidieron investigar la veracidad del panfleto que circuló en redes sociales. La Policía estableció que la amenaza no era real y fue hecha y divulgada por estudiantes que no querían tener clase.
“Verificamos este panfleto y carece de toda veracidad. No hay una concordancia de inicio a fin, porque se está autoincriminando el Clan del Golfo y mencionan otras palabras que realmente no son usuales de esta organización”, explicó el coronel Óscar Daza, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Así mismo, el jefe de la oficina de Convivencia y Seguridad Ciudadana, Saúl Leiva, manifestó que son cuatro estudiantes los que están detrás de este invento que causó temor iniciando esta semana.
“Se pudo establecer que dicha amenaza era falsa y que ese panfleto lo elaboraron cuatro estudiantes de ese colegio, en busca de no dar clases”, le dijo el funcionario al medio de comunicación local El Heraldo.
El secretario además informó que las autoridades locales se reunieron con los directivos del colegio para aclarar la situación. Así mismo, que los estudiantes aceptaron su responsabilidad en el hecho.
“Tuvimos una reunión con el rector de la institución, el jefe de la seccional de Infancia y Adolescencia de la Metropolitana de Barranquilla y la secretaría de Salud, con el fin de esclarecer los hechos que generaron pánico. Los jóvenes reconocieron su responsabilidad ante las autoridades que nos encontrábamos en la reunión” expresó el funcionario en la entrevista
“También se estableció un equipo interdisciplinario junto con la alcaldía de Puerto Colombia, la Policía y la misma institución, para hablar con los padres de familia sobre la situación. Realmente es algo que no puede volver a ocurrir en el municipio”, puntualizó Leiva en el diálogo con el medio mencionado.
Luego de las investigaciones y las reuniones que sostuvieron las autoridades locales y los directivos del colegio, se estableció que se retomaría las clases presenciales en el colegio Francisco Javier Cisneros.
Cabe recordar que hace aproximadamente 15 días en otra institución educativa del municipio alertaron sobre un supuesto explosivo, situación que también fue desmentida por las autoridades.