Después del lamentable crimen, el joven se entregó y confesó el asesinato cuando llegaron los policías a su residencia.
Estos hechos conmocionaron a una comunidad, este jueves 21 de septiembre. Una mujer, identificada como Lucía Juliana Pinto, de 47 años de edad, fue asesinada este jueves por su propio hijo Pablo Julián Lozano Pinto, de 28 años, en hechos ocurridos en un apartamento, en el barrio La Concordia de la ciudad de Bucaramanga, en el departamento de Santander.
Según conocieron medios locales, el joven había estado en un centro de rehabilitación por tener problemas de drogadicción.
Al parecer, bajo los efectos de las drogas, habría tomado un cuchillo y fuera de control le quitó la vida a su mamá de 32 puñaladas. Según el reporte de las autoridades, la mujer recibió 17 puñaladas en la región dorsal, 6 en el abdomen, 3 en el cuello, tres más en el tórax y una más en el flanco izquierdo.
Vecinos escucharon los gritos de la mujer pidiendo auxilio y de inmediato llamaron a la Policía.
Cuando la patrulla llegó al apartamento fue el mismo joven el que abrió la puerta y supuestamente confesó que había matado a su mamá.
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El hombre fue capturado por la Policía, mientras que la Sijin se encargó de la inspección del cuerpo, que fue hallado en la habitación principal del apartamento.
Según se conoció, el joven se encontraba en un centro de rehabilitación por fuera de Bucaramanga, pero por petición de la mamá realizó las gestiones para que continuara su proceso en la capital de Santander.
