El Gobierno del Cambio inauguró en Urabá un moderno radar 3D, infraestructura clave para el control aéreo y marítimo en una de las zonas más sensibles del país. La medida se da en medio de la reciente descertificación de Estados Unidos en materia de drogas y refleja el mensaje del Gobierno: Colombia mantiene su compromiso con la seguridad.
Con una inversión superior a $42.177 millones, el equipo fue instalado en el aeropuerto Antonio Roldán Betancourt y es el segundo de los siete radares contemplados en el Plan Nacional de Desarrollo. La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, explicó que el proyecto materializa los compromisos del presidente Gustavo Petro: “Urabá cuenta hoy con un radar 3D y una torre de 30 metros para las labores propias de seguridad náutica y aérea. Pese a la descertificación de Estados Unidos, vamos a seguir trabajando porque esto es un compromiso con el país».
El sistema incorpora radar primario 3D y secundario Modo S, antena de barrido electrónico, cobertura de hasta 250 millas náuticas, canal meteorológico integrado y sistema ADS-B. La infraestructura, además, cuenta con una torre de 30 metros con radomo (carcasa) protector y suministro redundante de energía.
Gracias a esta tecnología, Colombia amplía su capacidad para detectar y seguir aeronaves y embarcaciones, fortaleciendo la lucha contra el narcotráfico y mejorando la seguridad operacional en la región.
Además de los beneficios en seguridad, el proyecto genera empleo local, promueve la innovación tecnológica y adopta criterios de eficiencia energética. Con esta inversión, el Gobierno reafirma que las regiones históricamente rezagadas también son prioridad, consolidando al país como referente regional en sistemas de control avanzados.