La empresa extranjera FURA Gems, con nombre en el país de Coscuez S.A. estaría explotando tierras sobre las que no tiene ningún título minero bajo la autorización de las entidades ambientales y locales.
Zambia es el país con más exportaciones en el mundo y Colombia el segundo. Aunque Colombia es el principal productor y exportador de esmeraldas de alta calidad en América Latina y el mundo. Para poder explorar estos lugares en Colombia, se necesita una autorización de parte de la Agencia Nacional Minera (ANM), permiso que, según una investigación de la revista Cambio, la empresa Coscuez S.A no tiene.
La explotación de esmeraldas en el país se concentra básicamente en los departamentos de Cundinamarca y Boyacá, en los denominados cinturones esmeraldiferos Oriental y Occidental. Allí, en el municipio de San Pablo de Borbur, Boyacá la empresa FURA Gems Coscuez tiene un permiso de la Agencia Nacional Minera ANM, de la cual según la investigación traspasó los límites.
De acuerdo con la revista Cambio “Una resolución de la Agencia Nacional Minera (ANM), proferida el 27 de mayo, ordenó “el desalojo y la suspensión inmediata y definitiva de los trabajos y obras” que adelantaba la compañía canadiense en una bocamina –que es la galería o pozo que sirve de entrada a una mina– conocida como La Paz y que tiene una longitud de 874 metros”.
Según establece la agencia, Fura no cuenta con título minero sobre el área del contrato de concesión N° HFN-151, que es el área en la que se encuentra la bocamina La Paz, y no tiene, por lo tanto, autorización para explotar los recursos que allí se encuentran.
Dentro de la inspección por parte de la Agencia, se observó que la excavaciones traspasaron los límites llevaban y que estas exploraciones se estaban realizando alrededor de seis meses, lo cual transgrede los permisos otorgados.
Cabe recordar que del 3 al 10 de abril del pasado mes de abril, la empresa esmeraldera, Fura Gems llevó a cabo la segunda subasta de esmeraldas en bruto, en Dubái y Sharjah (Emiratos Árabes Unidos), extraídas de la mina Coscuez, municipio de San Pablo de Borbur, Boyacá. De los 54 lotes exhibidos, se vendieron 50 y de 201.644 quilates (exceptuando las calidades comerciales), fueron vendidos 179.529 quilates, es decir el 89 %.
Eso quiere decir que si la exploración llevaba alrededor de seis meses de exploración ilegal, hay una alta probabilidad que esas esmeraldas que se vendieron sean del lote explorado en los terrenos donde no tienen autorización.
La revista Cambio, mostró una serie de documentos que el periodista Juan Pablo Vásquez publicó en Twitter. De acuerdo a Cambio “La minera canadiense cuenta con un contrato de concesión sobre un predio contiguo (122-95M) y, al parecer, se aprovecha de esa proximidad para adentrarse en la bocamina vecina y realizar trabajos”.
Fura por su parte interpuso un recurso en contra de la resolución de la ANM sobre “el desalojo y la suspensión inmediata y definitiva de los trabajos y obras”, pero que según el artículo de Cambio, está pronto a vencer. Y que la única forma de defensa de esa invasión es que tenga un título minero inscrito en la zona invadida.
El alcalde de San Pablo de Borbur, Mauricio Obando fue informado sobre la invasión de la minera canadiense y no ha hecho nada al respecto. Según una publicación de @aplastapayasos “Este es Mauricio Obando, alcalde de @SanPabloBorbur, agotándose en Dubái la plata de LA SUBASTA ILEGAL de esmeraldas, sacadas de tierras tituladas bajo amparo, que la @DIANColombia está demorada en investigar. ¿O también están en ese torcido?”.
Por su parte, la minera de esmeraldas FURA Gems Coscuez tuvo inconvenientes en octubre de 2021 cuando mineros realizaron ataques a las instalaciones de la empresa en el municipio de San Pablo de Borbur, de acuerdo con la información, los mineros eran trabajadores que denunciaron condiciones deplorables para trabajar.