El presidente de Ecuador Guillermo Lasso, decretó estado de excepción por 60 días “para garantizar la tranquilidad del país y las elecciones libres”.
Según la Policía ecuatoriana, tras el crimen perpetrado contra el candidato presidencial de derecha Fernando Villavicencio en la tarde del miércoles 9 de agosto, realizaron una operación especial que terminó con la captura de seis de los presuntos autores materiales del homicidio: cinco de nacionalidad colombiana y uno venezolano. Todos, pertenencientes a grupos de delincuencia organizada, aseguraron.
Se trata de Andrés Manuel Mosquer Ortíz, José Neider López Hitas, Jules Osmín Castaño Alzate, Jhon Gregore Rodríguez y Adey Fernando García García. Este último contaba con antecedentes penales por homicidio y narcotráfico por hechos registrados en noviembre de 2018.
La aprehensión se dio en flagrancia en varias sectores de Quito, donde según la Fiscalía, un vehículo estacionado en uno de los inmuebles allanados en Conocoto, “se encontró una maleta con armas y granadas en su interior, indicios que están siendo ingresados en cadena de custodia”.
“En circunstancias que sujetos desconocidos dispararon por varias ocasiones en contra de la víctima. Con este antecedente antes descrito, las unidades de la Policía Nacional del Ecuador, a través de su eje investigativo, realizaron un trabajo coordinado en conjunto con la Fiscalía General del Estado, donde a través de la aplicación de medios técnicos, cotejamientos morfológicos, información de testigos y rutas técnicas, permitió ubicar varios domicilios en el sector de Conocoto, al sureste de Quito, donde se ocultaron los presuntos autores del crimen”, dijo la Policía ecuatoriana.
De esta manera, hasta el momento, el ente acusador ecuatoriano entregó un balance de la incautación de un fusil, una subametralladora, 4 pistolas, 3 granadas, 4 cajas de munición, 2 motos, 1 vehículo y 2 cargadores de fusil. Asimismo, 3 policías resultaron heridos durante el hecho.
Los detenidos fueron trasladados hasta la unidad de Flagrancia con resguardo policial, para ser puestos a órdenes de las autoridades competentes.
El jefe de Estado, Guillermo Lasso, calificó el magnicidio como “un crimen político con carácter terrorista, un intento de sabotaje a las próximas elecciones”. Sin embargo, no canceló la contienda electoral que se llevará a cabo el próximo 20 de agosto.
Lasso, decretó estado de excepción por 60 días “para garantizar la tranquilidad del país y las elecciones libres”.
El cádaver del excandidato presidencial Fernando Villavicencio salió en un carro fúnebre de Medicina Legal a una funeraria donde será velado en las próximas horas.