Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

julio 5, 2023

Eln secuestró a una sargento del Ejército con sus dos hijos menores, uno de ellos está enfermo.

El grave crimen fue ejecutado por esa guerrilla el pasado 3 de julio, pero solo fue informado por el Ejército, después de comprobar la autoría.

En lo que constituye uno de sus más atroces crímenes, el Eln secuestró hace tres días en Arauca a la sargento segundo del Ejército Ghislaine Karina Ramírez y a sus dos hijos, uno de seis y otro de ocho años, uno de los cuales padece de autismo.

La suboficial y sus dos hijos viajaban hacia el municipio de Arauca. La familia fue secuestrada por integrantes del frente ‘Domingo Laín’, de acuerdo con la información oficial, cuando en horas de la noche pasaban por el municipio de Fortul, en ese mismo departamento.

La uniformada y sus dos menores hijos son familia de un oficial que también pertenece a la Fuerza de Tarea Quirón, lo que constituye claramente un crimen de lesa humanidad.

La información la ofreció el comando de la Fuerza de Tarea Quirón, orgánica de la Octava división del Ejército, a 24 horas de que empiece el alistamiento de esa guerrilla para cesar sus acciones terroristas.

Ese comando rechazó el crimen que viola los derechos humanos e infringe las disposiciones del Derecho Internacional Humanitario (DIH).

La Octava División informó también que ya reportó el hecho al Ministerio de Defensa para que adelante las gestiones que den pronto con la liberación de los tres secuestrados.

Si bien el secuestro ocurrió el pasado 3 de julio y solo fue confirmado por el Ejército en las últimas horas, enrarece el comienzo del cese al fuego pactado con el Gobierno de Gustavo Petro, en el marco de su “paz total”.

Esta conducta atroz del Eln se suma al asesinato en las últimas horas, en Norte de Santander, de tres policías, uno ejecutado por un francotirador y los otros dos atacados a mansalva mientras tomaban su desayuno en un restaurante; y al anuncio de un ‘paro armado’ en el Chocó.

El cese al fuego comienza este jueves por espacio de un mes y, como ocurre con frecuencia en los proceso de negociación con las guerrillas, esos grupos armados arrecian su accionar delictivo antes de comenzar diálogos, pues tiene la idea de que así llegan fortalecidos a la mesa de negociación.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

PUBLICIDAD