La actriz de cine porno actualmente se enfrenta contra Instagram por haberle cerrado su cuenta personal bajo el argumento de que ofrecía servicios sexuales; este martes la también empresaria se presentó ante la Corte Constitucional para defender el derecho a la expresión.
La modelo y actriz de cine porno, Esperanza Gómez, explicó ante la Corte Constitucional en la mañana de este martes, las razones que la llevaron a interponer una tutela en contra de Instagram por haberle cerrado su cuenta personal -que superaba los cinco millones de seguidores- por el contenido que publicaba.
La pelea judicial de la creadora de contenido para adultos contra Facebook Colombia, Instagram Colombia y Meta Platforms, comenzó en 2021, luego de que -según la tutela- en marzo y noviembre del año pasado Instagram eliminará seis de sus publicaciones porque “infringían las normas comunitarias” al contener servicios sexuales.
De acuerdo con Gómez, ella no estaba incumpliendo con las normas de la plataforma, por lo que continuó publicando “para expandir su modelo de negocio y consolidar su marca personal”. Fue así como Instagram decidió cerrar su cuenta que, a mayo de 2021, sumaba 5.7 millones de seguidores.
Al considerar la medida como injusta y desproporcionada, la actriz de cine porno decidió llevar su caso hasta la Corte Constitucional argumentando que, primero, el contenido que sube a sus redes no promueve servicios sexuales, y segundo que sus publicaciones no son únicamente sobre temas sexuales o eróticos.
“Estuve casi cuatro años sin hacer nada de entretenimiento para adultos y veo que en mayo de 2021 cierran mi cuenta con 5.7 millones de seguidores. Yo antes de ser actriz de entretenimiento para adultos fui modelo de campañas publicitarias como con Bavaria y la Chica Águila, siendo imagen de diferentes marcas de lencería, de ropa deportiva, de moda y belleza, pero Instagram decide encasillarme en la pornografía y Esperanza Gómez no es solamente pornografía”, indicó la modelo ante la alta corte.
La actriz además insistió a la Corte Constitucional que el contenido que Instagram le eliminó eran fotografías suyas en las que aparecía en ropa interior, tal y como las que suben otras influencers o modelos, señalando así que, mientras a ella si le censuraban su contenido, Instagram no hacía lo mismo con otras cuentas.
“Me molesta que Instagram empiece a censurar mi contenido, me tildan que siempre hago contenido explícito y ofreciendo servicios sexuales y Esperanza Gómez ha sido orgullosamente actriz porno, sí, pero nunca he sido prostituta ni escort. Yo no soy prostituta y si en algún momento la hubiera ejercido como una fuente de trabajo, me sentiría orgullosa y también exigiría el respeto, la dignidad y el derecho al trabajo”, señaló Gómez.
“A renglón seguido, agregó: “Yo quiero que me dejen de discriminar.Estoy cansada del acoso, de la persecución porque no es el único perfil que me han cerrado. Yo no soy señores solamente pornografía”, reiteró la creadora de contenido para adultos.
Al respecto del caso, la Sala de la alta corte que citó la audiencia, señaló: “El caso analizado es novedoso, puede tener impactos sobre muchos otros usuarios de la red social Instagram y está relacionado con un espectro amplio de temas que van desde el derecho corporativo hasta la libertad de expresión y la igualdad, pasando por la prevención de la explotación sexual y de la trata de personas”.
Con el caso, la actriz busca proteger sus derechos a la igualdad y a la no discriminación, a la libertad de expresión, al libre desarrollo de la personalidad, al trabajo, a la vida digna y al mínimo vital y móvil.
De acuerdo con el diario El País de España, el fallo de la alta corte se conocería dentro de 15 días. En el caso de que el proceso resulte a favor de Gómez, Instagram tendría que devolverle su cuenta a la actriz, la cual deberá incluir el número de seguidores que ella poseía. La plataforma además podría llegar a pagarle una indemnización por el perjuicio económico que la modelo argumenta sufrió durante un año.